11 DE junio de 2021
Americana, Brunch, Café, Desayunos, Invierno, Otoño, Postres, Vegetariana
Galletas de avena con pasas
Estas son las clásicas que sobran en la vitrina por estar al lado de su rival más carismático… el chocolate. Pero los amantes de la culinaria otoñal, de los olores a especias y de las cobijas peludas, entienden que las galletas de avena no se cambian por nada.
A ellas no les importa la popularidad. Son agradecidas por tener a un grupo limitado de personas fieles, que las quieren de verdad. Eso es lo que hay que buscar en la vida, ¿no les parece? A personas —aunque sean pocas— que no te cambien por nada, que te sean fieles, que te quieran de verdad.
La cocina invita a reflexionar, puede enseñarle mucho a aquellos que la vean con ojos creativos. Si tenemos algo que aprender de todas las personas, ¿por qué no aprender algo de todas las recetas?
Galletas de avena con pasas
Ingredientes
- 1 DOCENA
1/2 Taza Mantequilla – a temperatura ambiente.
1/2 Taza Azúcar Morena
2 Cdas. Azúcar Blanca
1 Huevo – a temperatura ambiente.
1 Chorrito de Vainilla
2 Cditas. Melaza – si no la encuentras con ese nombre, puedes derretir piloncillo y diluirlo con muy poca agua en una olla.
3/4 Taza Harina
1/2 Cdita. Bicarbonato de Sodio
1/2 Cdita. Canela
1/4 Cdita. Sal
1 1/2 Taza Avena
100g Pasas
*Opcional: Sal de mar
Instrucciones
- Mezcla la mantequilla con los dos tipos de azúcar hasta que el color se vea más claro. Incorpora el huevo. Ahora agrega la vainilla y la melaza.
En otro bowl, incorpora la harina, el bicarbonato, la canela y la sal. Agrégalo a la mezcla de ingredientes húmedos hasta que quede completamente incorporado. Añade la avena y las pasas. Refrigera la masa por 30-60 minutos. Mientras más tiempo la dejes refrigerando, más “gorditas” se van a ver tus galletas.
Precalienta el horno a 180°C y engrasa una charola. Coloca bolitas de un poco menos de 1/4 taza, separándolas lo suficiente para que se extienda cada galleta. Agrega un poco de sal de mar sobre cada una si lo deseas. Hornéalas por unos 15-17 minutos o hasta que los bordes se vean firmes. En este punto tu casa va a empezar a oler a otoño. Aquellos que nunca ponen un pie en la cocina van a visitarte para preguntar qué huele tan bien.
Cuando ya estén listas, déjalas reposando en la charola caliente por 5 minutos más y después transfiérelas a una rejilla para enfriar.
Notas
- Un vaso de leche